Ayer día 17 fuí con un grupo de amigas que nos hacemos llamar "Las chicas de Oro" -hay más que no pudieron venir- a los Jardines de Cervantes para ver las rosaledas y visitar los Jardines que yo desconocía fueran tan grandes.
La verdad es que me gustaria vivir lo suficiente para ver todo lo que me he perdido durante tanto tiempo.
Había pasado durante años por allá y desconocía que fuera tan grande y que hubiera un parque para jugar los niños y más tarde una rosaleda. Creía que era un parterre grande, sí con árboles y alguna planta, nada más.
Las chicas nos encontramos en la entrada del parque y después de visitarlo nos fuimos a comer a un Frankfurt que está delante de los Cuarteles del Bruc en la Diagonal barcelonesa.
Mi decepción fue que no habían mesas y sillas para sentarnos a comer el bocata, pero hay que adaptarse al momento y tras la comida en un banco cercano, una de las chicas que nos había traído en coche nos llevó a una terraza donde hicimos la sobremesa.
Ya por la tarde regresamos a casa donde me animé a cambiarme y con dos de mis amigas nos fuimos al baile donde quemamos unas cuantas calorías....
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