UN MATÍ AMB EL CIRQUE DU SOLEIL.

El domingo día 29 fuimos mi amiga Rosa y yo a ver el Cirque du Soleil al Palau Sant Jordi.

Para las dos era la primera experiencia y aunque los números, vestuario, puesta en escena y música estuvieron muy bien a las dos nos quedó la sensación de que faltaba alguna cosa.

No es que no nos gustara. 

Cada una tiene su opinión, pero en lo que coincidimos es que faltó más variedad en los números.

Y para mí faltó más números de acrobacias y malabares. 

Le Cirque du Soleil no és un circo de fieras. Es puro marketing y espectáculo. 

Pero aunque disfruté mucho con lo que antes describo me faltó que menos "perder el tiempo" en movimientos y pasos que no aportaban nada y más números espectaculares de acrobacia, magia y malabares.

Ahí os dejo un pequeño reportaje fotográfico y fílmico. 

      Reportaje fotográfico del evento.

Como sabeis hay eventos en los que está prohibido filmar o hacer fotografías. Pero yo no puedo resistir la tentación de llevarme un trocito para el recuerdo. Después es un dvd que tienes en su lugar de la casa que ya no miras nunca más. Pero tienes aquel pequeño recuerdo de aquel día que fuiste a ver aquel acontecimiento artístico o musical. Las imágenes no son buenas y no pude grabar lo que realmente valió la pena a pesar de que me supo a poco. 

CONCIERTO DE AÑO NUEVO EN EL PALAU DE LA MÚSICA

El pasado día 31 de Diciembre fui por primera vez al concierto que cada año en el Palau de la Música o en el Liceo se celebra con las compañías venidas de Viena para deleitarnos con las espléndidas melodías del gran compositor vienés Johann Strauss Jr., padre y sus hermanos.

Fui con mi amiga Rosa con la que comparto no solo el country, sino también otras cosas como un concierto de música melódica, ir a un Museo, de compras, al cine, al teatro y otras actividades que nos unen.

Las dos no tenemos hijos y esto nos da un poco de libertad para ir a los sitios y disfrutar de una buena velada.

Y como pensionistas hemos de ahorrar un dinerillo para ir a estos eventos. Ahora ya no és como antes.

O quizás sí. Pero al contar el precio en euros no nos damos cuenta de que cuesta igual o más que hace veinte o treinta años atrás.

Durante 29 años, por cuestiones personales y económicas, no me pude dar el gusto o el lujo de asistir. En esta nueva etapa de mi vida las emprendo con ilusión y tristeza.

Una parte de mí desearía que otra persona estuviera a mi lado disfrutándolo, pero también es cierto que yo hubiera ido sola al concierto porque a él no le agradaban estos eventos.

Qué os puedo decir que no sepais.

El local de lujo. Hacia más de 30, por no decir, 40 años que no ponía los pies en el Palau de la Música y al principio con los anexos que le han añadido al edificio me sentí un poco perdida. No sabía muy bien por dónde iba. Pero una vez me vi en el salón principal fue como si me retrotrayera al pasado y los pies se me fueron solos para ir donde estaba mi localidad y tomar asiento.

Lo malo. Que las personas que habían delante no nos dejaron ver el espectáculo con todo su esplendor.

Lo bueno. Que con aquella maravillosa música, arias cantadas por magníficas sopranos y el colorido y clase de sus números de baile, te hacían olvidar dónde estabas y te daba la sensación de estar en un palacio rodeada por la burguesía y la nobleza y bailando con un apuesto caballero un vals, una polka o una marcha militar.
En la primera parte sólo me atreví a tomar de vez en cuando alguna instantánea pero en la segunda me envalentoné y filmé lo que buenamente pude el concierto. Esto sí con mucho cuidado de que no me pillaran. 
He aquí la parte filmada del evento.

Y las imágenes que pude captar que como ya os he contado no son muy buenas pero que dan una idea de cómo fue el concierto. 

Que tengais un buen año y hasta la próxima.